El adelanto era promisorio. Un reggae ("Miracle Worker") en el que se mezclaba la dulce voz de Joss Stone, la cadencia jamaiquina de Damian Marley, y el estilo inconfundible de Jagger, hacían prever un gran disco. Sin embargo, la expectativa no se iba a cumplir.
Superheavy, el nuevo (¿súper?) grupo formado por Mick Jagger, Dave Stewart (ex Eurythmics), Joss Stone, Damian Marley, y A. R. Rahman, compositor de la banda sonora de la película "Slumdog Millionaire", acaba de editar su disco homónimo.
La idea mentora de la unión de estos músicos pareciera ser la mezcla de estilos y culturas en busca de un sonido diferente. Dentro de esta búsqueda, la banda recuerda por momentos a Black Eyed Peas ("Satyameva Jayathe", "Beautiful People", "Energy"). Pero, cumpliendo una de las grandes máximas del fútbol, la suma de las individualidades no hace un equipo.
En Superheavy, cada uno de los integrantes se luce dentro del estilo por el cual es conocido, sin lograr integrarse o adaptarse al resto, y, por lo tanto, nunca llegan a sonar como una banda sólida.
A pesar de esto, el talento gana por momentos, y hace aparecer un par de gemas destacables, sobre todo cuando se juntan las voces de Jagger y (que ironía) Stone, como en la sufrida "One day one night", en la que se mezclan en un dueto final épico; en la rockera "I can't take it no more", con reminiscensia a U2; o en "I don't mind", con homenaje a Eurythmics incluido. También, cabe destacar "Common Ground", un ska con arreglos de violines, que viene solo en la versión deluxe.
Si bien "Superheavy" no cumple con la expectativas, más que nada para los que las tenían, vale la pena escucharlo, y, en esta época de adictos al random, dejar un par de temas en la lista.
Los medios pierden demasiado tiempo intentando demostrarse objetivos. Y nunca lo van a lograr.
viernes, 28 de octubre de 2011
viernes, 21 de octubre de 2011
"Baldíos Lunares", de Juanse
Sorprende desde el primer minuto. Y eso ya es bueno. "Baldíos Lunares", el nuevo (tercer) disco como solista de Juanse, tras una separación (?) polémica de Los Ratones Paranoicos, arranca con una de las canciones más tranquilas de las que se lo ha escuchado cantar, con una guitarra acústica al frente y arreglos de cuerdas incluidos ("El sol"). Como si fuera poco, lo siguiente será un reggae en tono comedia ("Samurái"), en el que contará la historia de su tintorero samurái, con la participación estelar de, ni más ni menos, que Diego Arnedo en bajo.
Claro que también habrá tiempo para volver a sus raíces rocanroleras y revisar el sonido paranoico, pasando desde los primeros tiempos más crudos ("Algo sucia", con la participación de Deborah Dixon, "El fuego" con "Bocón" Frascino, "Baby doll"), a la última época cancionera ("Tomates", "Solo una vez más"). Pero incluso, dentro de este revisionismo, Juanse encuentra la manera de volar un poco más, como en "Descomposición", tema con tintes stones que también incluye arreglos de cuerdas y en el que el ex líder de Los Ratones incursiona en el saxo, o en "Carne radioactiva", con algunos dejos jazzeros.
Y si nada de esto logró sorprenderlos, para el final, Juanse, admirador confeso de Spinetta, se guarda una bomba, y se despacha con una versión disco de "Gabinetes espaciales", clásico de Almendra, que generará alguna polémica, sobre todo entre los puristas.
Si bien, prejuicios de por medio, todo parecía indicar que "Baldíos Lunares" sería una secuela de la discografía paranoica, Juanse muestra en este material una búsqueda sonora, al menos de a ratos, diferente, que resulta en un interesante primer paso en esta nueva etapa.
Claro que también habrá tiempo para volver a sus raíces rocanroleras y revisar el sonido paranoico, pasando desde los primeros tiempos más crudos ("Algo sucia", con la participación de Deborah Dixon, "El fuego" con "Bocón" Frascino, "Baby doll"), a la última época cancionera ("Tomates", "Solo una vez más"). Pero incluso, dentro de este revisionismo, Juanse encuentra la manera de volar un poco más, como en "Descomposición", tema con tintes stones que también incluye arreglos de cuerdas y en el que el ex líder de Los Ratones incursiona en el saxo, o en "Carne radioactiva", con algunos dejos jazzeros.
Y si nada de esto logró sorprenderlos, para el final, Juanse, admirador confeso de Spinetta, se guarda una bomba, y se despacha con una versión disco de "Gabinetes espaciales", clásico de Almendra, que generará alguna polémica, sobre todo entre los puristas.
Si bien, prejuicios de por medio, todo parecía indicar que "Baldíos Lunares" sería una secuela de la discografía paranoica, Juanse muestra en este material una búsqueda sonora, al menos de a ratos, diferente, que resulta en un interesante primer paso en esta nueva etapa.
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martes, 11 de octubre de 2011
"Mugre", de Acorazado Potemkin
"Mugre" es el disco debut de Acorazado Potemkin, un power trío formado por músicos de larga trayectoria en el Rock Nacional: Juan Pablo Fernández (Pequeña Orquesta Reincidentes) en la voz y guitarra, Luciano Esain (Valle de Muñecas,Motorama, Flopa Manza Minimal) en batería, y Federico Ghazarossian (Los Visitantes, Don Cornelio y la Zona, Me darás Mil Hijos) en el bajo.
En una época donde la multiplicidad y el mestizaje sonoro parece ser el paradigma, Acorazado decide romper los esquemas para volver a un formato/sonido clásico, y con (¿sólo?) tres instrumentos armar uno de mejores discos del año.
Con la fuerza interpretativa de Fernández, esa voz que mezcla el tango y el rock en el mismo registro, y que acompaña genialmente el fraseo de sus guitarras, apoyado en la sólida base que arman Esain/Ghazarossian, el trío se mueve dentro de una atmósfera oscura que le hace honor al nombre, tanto del disco como de la banda. Y dentro de ésta atmósfera, Acorazados muestra una gran capacidad para generar y transmitir una interesante variedad de climas, dándole/se el protagonismo necesario a cada uno para lograrlo. Así, en "La mitad", la banda introduce al oyente en un clima asfixiante que se complementa con la letra, y en el que Fernández explota su poder lírico ("si es cierto que lo nuestro termina, si es cierto que hay que hacerle un final, entonces quiero que te lleves mi hombro izquierdo, que sin tu pelo no lo voy a usar jamás"); en "Puma Thurman" muestran como contar una historia, con dejos Bioycasarescos, en una canción; en "Caracol" y "Quiero" se despachan con rocanroles más setentoso; y en "Los muertos" homenajean a los mismos, como una señal más de que en el lado oscuro es donde se sienten cómodos.
A pesar de su sonido clásico, Acorazado se adapta a las nuevas generaciones y, sobre todo, a las actuales formas de distribución, y subió el disco a su página desde donde se puede bajar de forma totalmente gratuita, y legal (leer con el espacio, sino sonará como su antónimo). El link por acá.
En una época donde la multiplicidad y el mestizaje sonoro parece ser el paradigma, Acorazado decide romper los esquemas para volver a un formato/sonido clásico, y con (¿sólo?) tres instrumentos armar uno de mejores discos del año.
Con la fuerza interpretativa de Fernández, esa voz que mezcla el tango y el rock en el mismo registro, y que acompaña genialmente el fraseo de sus guitarras, apoyado en la sólida base que arman Esain/Ghazarossian, el trío se mueve dentro de una atmósfera oscura que le hace honor al nombre, tanto del disco como de la banda. Y dentro de ésta atmósfera, Acorazados muestra una gran capacidad para generar y transmitir una interesante variedad de climas, dándole/se el protagonismo necesario a cada uno para lograrlo. Así, en "La mitad", la banda introduce al oyente en un clima asfixiante que se complementa con la letra, y en el que Fernández explota su poder lírico ("si es cierto que lo nuestro termina, si es cierto que hay que hacerle un final, entonces quiero que te lleves mi hombro izquierdo, que sin tu pelo no lo voy a usar jamás"); en "Puma Thurman" muestran como contar una historia, con dejos Bioycasarescos, en una canción; en "Caracol" y "Quiero" se despachan con rocanroles más setentoso; y en "Los muertos" homenajean a los mismos, como una señal más de que en el lado oscuro es donde se sienten cómodos.
A pesar de su sonido clásico, Acorazado se adapta a las nuevas generaciones y, sobre todo, a las actuales formas de distribución, y subió el disco a su página desde donde se puede bajar de forma totalmente gratuita, y legal (leer con el espacio, sino sonará como su antónimo). El link por acá.
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